Consejos para ser un buen líder
¿Alguna vez te has preguntado cómo ser un buen líder? Asumir un rol de liderazgo positivo en una determinada área es algo que a todos nos pasa por la cabeza en al menos una ocasión.
Especialmente si anhelas mejores oportunidades laborales, éxito y autorealización, debes haberte preguntado esto varias noches antes de dormir, en el autobús camino al trabajo y en muchas situaciones más en que tenemos un pequeño espacio de tiempo para reflexionar.
Tomando en cuenta esto, en este artículo queremos compartirte valiosos consejos sobre cómo ser un buen líder que otras personas realmente quieran seguir y que sea capaz de dejar un legado positivo en su entorno.
Capacítate de manera formal y profunda
Un líder no es sólo carisma, dinamismo y simpatía. Para que realmente sea íntegro y deje un legado positivo, debe tener sólidos conocimientos sobre un área determinada.
Por ese motivo, si quieres convertirte en un gran líder en el futuro cercano, ¡no pierdas la oportunidad de capacitarte!
Para saber qué carrera te conviene estudiar, primero debes definir cuáles logros, aportes y beneficios quieres alcanzar por medio del liderazgo.
Desarrolla tus habilidades comunicativas
Cuando se trata de cómo ser un buen líder, la comunicación es un aspecto elemental.
Para tener éxito al dirigir grupos y proyectos es necesario, en primer lugar, transmitir mensajes e ideas de manera asertiva.
Esto conlleva expresar de forma exacta lo que se piensa y utilizar las palabras, frases y oraciones necesarias para garantizar que los demás comprendan.
Por otro lado, es importante contar con elocuencia, buena oratoria y, sobre todo, un vocabulario adecuado para el equipo de trabajo.
Las habilidades comunicativas relacionadas con la redacción y la escritura también son valiosas para un líder.
Incluso, el liderazgo demanda que tengamos muchos cuidado con nuestros gestos, poses y la comunicación no verbal en general.
Otro factor importante, en el sentido de la comunicación, es dominar un segundo idioma, pues esto también denota un gran nivel de capacitación y es sinónimo de una mayor capacidad de relacionarse socialmente.
Si cuentas con una buena formación profesional y, además, dominas idiomas como el inglés, proyectarás el profesionalismo y la sabiduría que debe tener todo gran líder.
¡Predica con el ejemplo!
Expresarse de manera correcta y asertiva, dominar un segundo idioma y conocer a profundidad un campo profesional son factores esenciales, pero de poco sirven si el líder no predica con el ejemplo.
Cuando tengas un rol de autoridad dentro en el trabajo o, incluso, entre tu grupo de amigos y grupo familiar, cumple y toma en cuenta todo lo que exiges y recomiendas a lo demás.
De lo contrario, simplemente no serás un buen líder, sino una especie de “dictador” que con el paso del tiempo pierde credibilidad y poder de convencimiento.
Fomenta la proactividad
La proactividad es una cualidad valiosa en un buen líder, independientemente del área en la que se desenvuelva.
Esta aptitud hace referencia, entre otras cosas, a la capacidad de adaptarse a los cambios, algo clave en el vertiginoso mundo actual.
Como líder, siempre deberás estar dispuesto a dejar atrás viejos paradigmas y a ser receptivo a innovaciones, mejoras e incorporación de recursos y sistemas tecnológicos a los proyectos y las tareas cotidianas.
Sumado a esto, la proactividad también es considerada una actitud anticipatoria, que les permite a los líderes adelantarse a los acontecimientos, especialmente a los problemas y contratiempos.
Básicamente, un buen líder evalúa los escenarios y hace todo lo posible por evitar dificultades y situaciones adversas, pero en caso de que éstas se presenten tiene la astucia y disposición necesaria para resolverlas.
Estúdiate y conoce tus límites
Ningún líder es perfecto ni lo sabe todo, ¡siempre ten esto en cuenta!
Por ese motivo, es importante que te autoanálisis para que sepas, a ciencia cierta, cuáles son tus límites y en qué aspectos no eres tan bueno.
Ese pequeño ejercicio de reflexión te hará un líder mucho más humano y, a la vez, realista que tome decisiones de manera coherente y que no se niegue a delegar funciones y dejarse ayudar por los demás.
¡Perfecto! Ya nos estamos acercando al final de esta breve, pero importante guía sobre cómo ser un buen líder.
Por último, simplemente queremos recordarte la importancia del primero de nuestros consejos: la educación universitaria. Para que empieces tu camino hacia el liderazgo desde ahora, en INSADEP contamos con 4 licenciaturas ejecutivas consulta nuestra oferta educativa.