5 consejos para impulsar tu productividad si estudias y trabajas
Cumplir con tu trabajo, atender a tu familia, actualizar tu Facebook y no tener un espacio para concentrarte. Y aun así, es posible estudiar y trabajar. A veces nos pasa que entre tantas actividades al día, nos parece imposible agregar algo más a nuestra agenda. Por eso es que los jóvenes y adultos que están trabajando en ocasiones no se atreven a comenzar o retomar sus estudios.
Y es que es la falta de tiempo la principal razón por la que muchos mexicanos deciden dejar los estudios y dan preferencia a su trabajo, de acuerdo con los resultados de una encuesta realizada el pasado agosto por OCCEducación.
Pero la anterior no es la única razón, también está el no tener un lugar idóneo para aprender o las redes sociales. ¿Les parecen familiares las frases “ojala el día tuviera más horas” o “no puedo partirme en dos”?
Lo cierto es que nada es imposible cuando se tiene determinación a cumplir las metas, y así lo ha demostrado siempre la comunidad de INSADEP, en donde más del el 70% de nuestros alumnos estudian y trabajan.
Aquí algunos consejos para ajustar ambas actividades en tu vida.
1.- Evita el multitasking. Atomizar tu atención en diversas actividades terminará por mermar la calidad de tu trabajo y capacidad de aprendizaje, señala la revista Forbes. Es mejor hacer una actividad y poner toda tu atención en ella.
2.- Encuentra un lugar ideal. Tú te conoces mejor que nadie, por lo que sabrás si necesitas silencio total, estudiar con un poco de música o ir a una cafetería. La meta es encontrar un lugar en el que sientas que puedes explotar todo tu potencial.
3.- No sacrifiques el sueño. El cuerpo necesita el descanso para funcional plenamente. No dormir afecta tu capacidad de concentración y retención.
4.- Sé creativo. Elabora mapas mentales de tus lecturas para recordar más fácilmente tus lecciones o busca la forma de involucrar tu trabajo con tus deberes. Tal vez tus labores puedan ser un buen tema para tus ensayos, señala el sitio Universia
5.- Usa una agenda. Tener por escrito tus actividades te ayudará a no olvidar deberes y a evitar programar demasiadas actividades en un mismo día o semana.